Perseidas 2013. Cuando encontrar un cielo oscuro se vuelve imposible
Como cada año por estas fechas, hace unos días, ha llegado a nuestros cielos la lluvia de estrellas más popular. Las lágrimas de San Lorenzo acudían puntuales a su cita con las miles de personas, que siquiera una vez al año, miran al cielo nocturno, para ver un espectáculo, que también como cada año, se nos prometía único. Las previsiones para noche más cercana al máximo eran buenas. Según el Instituto Geográfico Nacional, debido a que la Luna se ocultaba pronto, aunque el Instituto Astrofísico de Canarias, recordaba que el máximo de la “lluvia” se alcanzaría durante las horas de luz, por lo que de noche veríamos menos meteoros que en otras temporadas. Y también como siempre, las imágenes sólo nos ensenarían la parte bonita, una Perseida brillando menos de un segundo antes de desaparecer consumida para siempre. Por desgracia el derroche de brillo (y de dinero) de las farolas que iluminan el cielo, no las calles, no desaparece tan pronto.
Para observar en las mejores condiciones una lluvia de estrellas es necesario un cielo lo más oscuro posible. Las cercanías de las ciudades, incluso si el lugar desde el que observamos no tiene ningún punto de luz alrededor, no es suficiente, porque los núcleos urbanos generan demasiada contaminación lumínica.

Si se amplía la fotografía, puede verse una perseida poco brillante junto a Casiopea (la W que forman, si se unen con una línea, las 5 estrellas más brillantes). Credit: ACTIVATUNEURONA
También, como siempre que en Bilbao podemos disfrutar de un acontecimiento astronómico, ese día estuvo nublado. Aun así, como la paciencia tiene recompensa, dos días después del máximo, pudimos obtener esta fotografía de una Perseida pasando, aparentemente, bajo la constelación de Casiopea.
Quienes deseen saber más sobre contaminación lumínica y los problemas que provoca, que no sólo son astronómicos, sino que también afectan a nuestra salud, pueden visitar la página de la Asociación Contra la Contaminación Lumínica (Cel Fosc), literalmente, cielo oscuro.
Y quienes puedan viajar un poco en busca de los cielos de nuestros antepasados, nada mejor que hacerlo personas expertas en astroturismo. Pueden contactar con Cosmociencia en esta página web.